jueves, 16 de mayo de 2013

PERCENTIL 50

Antes de empezar a despotricar sobre el asunto que me ronda por la cabeza, voy a describirme un poco físicamente porque considero que viene a cuento sobre lo que posteriormente relataré:  mujer, edad 34 años, estatura 173cm, peso 61,9kgs (con frecuencia y sin hacerme ni pizca de gracia aumento a los 62,..), cabello rubio largo (y lacio para mi pesar), piel muy clara y... pecosa.

Dada mi estatura es lo más natural del mundo que mis hijos vayan a ser altos ¿no?.  De hecho ya lo son.  A sus entrañables diecisiete meses puedo afirmar que son de los niños más altos del parque.  ¿Y qué? os preguntaréis;  pues nada.  Que empiezo a estar un poco cansada de los comentarios de otras mamás y abuelas (más éstas últimas, la verdad...) acerca "lo grandes que son".  De verdad, (y ahora sí, empiezo a despotricar cual madre coraje que soy, que yo como la Belén Esteban:"por mis hijos ¡ ma-to ! ¿me entiendes? ;-)  ).  

A ver si soy capaz de hacerme entender.  No es que me moleste que me digan "ay qué grandes que están".  Lo que me molesta es que determinadas personas no sólo me lo dicen cada día, si no que además que en ocasiones utilizan adjetivos que no terminan de agradarme.  Enormes, grandullones... ¡Oiga no se pase! diría yo. ¡ Que el suyo es un retaco y yo no digo nada!.  Quizás penséis que exagero.  Que me molesto sin razón.  Yo también lo pensaba, sí, hasta que en dos ocasiones, a dos de estas personas a las que he constestado que sus niñas eran más pequeñas (de tamaño) me han ¡apuntado con el dedo! y moviéndolo de un lado a otro con una sonrisa en su cara de AUTOSUFICIENCIA me han dicho "¡No, no, no! mi niña está en el percentil 50 ".  Ale.  Tócate la figa.  Que rabia me ha dado en las dos ocasiones.  Rabia causada por ese gesto triunfal en sus caras.  Cómo si el hecho de que un niño cuya estatura se sitúa en el percentil 50 fuera mejor que otro cuya estatura no se encuentre en dicha ubicación.  Y encima es mentira.  Porque las mamás de las niñas en cuestión ya me dijeron que sus hijas  estaban en el percentil más bajo... ????. Todo muy absurdo, lo sé.  Me doy cuenta ahora de lo tonta que soy por irritarme.  Y me doy cuenta también de lo tontas que son ellas con su actitud.  Es más, y ya poniéndome yo también en plan triunfal, podría contestarles con una amplia sonrisa: ¡Ah no! mis niños están muy por encima del percentil 50.  Que ellos del montón no van a ser.  Ale.  Cómete ésa.  Pero va a ser que no.  Prefiero despotricar en mi blog...
No obstante, cabe añadir, que estas personas que me han causado malestar con sus comentarios son dos abuelas cuyos hijos y nueras no son precisamente ejemplares de belleza y atractivo. Más bien están bastante por debajo del percentil 50... Y no hay que olvidar nunca  que la envidia es muy mala....

Las personas son altas, bajas o percentil 50, es decir como la media.
Las personas son delgadas, gordas o percentil 50, es decir, como la media.
Las personas son guapas, feas o percentil 50, es decir, como la media.
Las personas son listas, tontas, o perCentil 50, es decir, como la media.

Yo soy alta.  Tengo amigas altas, bajitas y del montón.  Lo único que me fastidia de mi estatura es el hecho de que coincide al milímetro con la de mi marido, lo cual me impide ponerme tacones.  No me gusta nada estar más alta que él.  Me es indiferente la altura del prójimo, pero creo que nunca jamás tendría una pareja más bajita que yo.  No me gusta.  Aclarado este punto, me gusta ser como soy.  Mis hijos son preciosos y si a alguien "le pica" que sean altos, pues que se rasque.  No pretendan insinuar que ser bajito o del montón es mejor que ser alto porque no.  No es así. Y si tengo que sacar las garras para proteger a mis cachorros pues las sacaré ;-) .

Los niños ven, oyen, sienten y padecen, y que los adultos señalen a niños con el dedo por tal o cuál rasgo físico les enseña a ellos a hacer lo mismo.  Veo niños todos los días, y no todos son preciosos y perfectos pero no por ello le voy a decir a una madre qué gordita está tu niña, ó que feo es tu hijo ó que orejas de soplillo ha sacado el pobre. ¡Ni se me ocurriría!.  Pero hay padres y abuelos que sí.  Y así enseñan a sus hijos a señalar a otros, a establecer diferencias, y también a recelar.
Y repito que si me siento molesta por estos comentarios es simplemente por como se crecen con lo del percentil 50.

Por otro lado, mis niños también han heredado de mí unos preciosos ojos azules (bueno, los míos son bonitos percentil 50;  ellos han superado este percentil con creces jijiji).   Estas personas que tantísima importancia dan a su estatura  me han dicho "que ojos más bonitos tienen los dos" una sola vez.  Suficiente ¿no? pues con lo otro igual.  Una vez basta.  Todos los días convierte el comentario o la observación en impertinencia.

Y tras escribir este post me recrimino a mí misma.  ¡Si estoy orgullosísima!.  ¡Si son preciosísimos! ¿que me importa a mí lo que digan? ... pues me importa porque son mis hijos.  Si no los defiende su mamá ¿quién los va a defender? ... pues eso, que ¡¡ aquí estoy yo!! Preparada para enfrentarme a las superabuelas del parque .... qué cosas...

sábado, 4 de mayo de 2013

LA EXPULSIÓN DE ARGI

Argi ya no está en la casa de Guadalix;  el jueves por la noche fue expulsada del programa a causa de su broma acerca de ETA.  Me dio mucha pena, la verdad.  Nominada en numerosas ocasiones por sus compañeros y salvada por la audiencia, Argi era una de mis favoritas y lo cierto es que tenía muchas posibilidades de ganar el concurso y con ello el maletín de los trescientos mil euros.  La causa de que fuera una de mis favoritas es simplemente la veía muy bonachona.  Y la sigo viendo.  La creo cuando la veo arrepentida y pidiendo perdón por una broma hecha a sus compañeras que a causado polémica fuera y dolor en aquéllos directamente afectados por el terrorismo.  Para el que no sepa de qué va esto, pues hablo de Gran Hermano 14, y de la concursante que el otro día mientras hablaban ella y unas compañeras acerca de manifestaciones a las que habían acudido se le ocurrió decir en broma que: "yo sólo he ido a una, a la de que vuelva ETA".  Acto seguido y ante el estupor de sus compañeras, se apresuró a aclarar que iba de broma y que no era cierto.  Pero las palabras ya habían salido de sus labios y en este caso no se las lleva el viento.  Expulsión disciplinaria ha sido la consecuencia de su imprudente broma.  No me cabe duda de que la muchacha, bilbaina de veinte años, se siente avergonzada por lo sucedido.  La verdad es que se debe de sentir fatal.  Menudo marrón.  Y encima sin ser cierto lo dicho.  Boca-chancla que diría mi hermana.  
Bromas de mal gusto, hablar de más sin ser consciente de lo que se está diciendo y hacer uso del humor negro es algo muy habitual, pero en según que escenarios,  como que no. 
 Me viene a la cabeza aquélla frase que pronunció un alto cargo  hace no mucho y que decía algo así como que "Las leyes son como las mujeres, están hechas para violarlas".  También lo dijo en broma.  Jose Manuel Castelao Bragaña,  presidente del Consejo General de la Ciudadanía en el Exterior;   tuvo que renunciar al cargo.  El precio de su imprudencia.  
Expulsada de los Juegos Olímpicos de Londres el pasado año fue la atleta griega que publicó en su cuenta de twitter el siguiente comentario racista: "Con tantos africanos en Grecia los mosquitos del Nilo al menos tendrán comida casera!!!" se refería a un virus proveniente del Nilo que en Grecia había causado un muerto y varios infectados.  Ésta última a mí pena no me dio ninguna pena porque al parecer no lo escribió lo que se dice en broma, si no que la chica es racista sin más.
¿Medidas excesivas por comentarios fuera de lugar? puede.  ¿Trivializar mediante bromas sobre asuntos de suma gravedad? quién más, quién menos lo ha hecho alguna vez.  Pero obviamente no es lo mismo decir algo en tu casa con tu gente que en un medio de comunicación.  
Y ahora que finalizo me viene a la cabeza una película que siempre  arrasa en las taquillas españolas: TORRENTE.  No recuerdo ahora si es en la dos ó en la tres, donde determinadas escenas bien podían herir  la sensibilidad de la audiencia.  En una si no recuerdo mal, Torrente abusa (o viola) a una yonqui que está inconsciente.  En otra escena se parodia el ataque terrorista a las torres gemelas.  La sala entera (o casi) estalló en carcajadas.   Sé que no es lo mismo una película de risa que el tema en cuestión pero algo en común si que tienen y es que en ambos casos se trivializa sobre temas graves.   
Es fácil meter la pata hablando más de lo debido y bromeando sobre lo que no se debe.  Las imprudencias se pagan y aunque en este caso Argi me parece una chica estupenda, puedo entender que haya sido expulsada.  Para aprender, perder.