martes, 6 de julio de 2010

¿SE PUEDE SER GORDO Y FELIZ?


NOTA: GORDURA, QUE NO OBESIDAD MÓRBIDA.

Hace un par de semanas, me hallaba yo un sábado por la noche, pintándome las uñas sentada a la mesa de mi cocina, y viendo mientras tanto el programa LA NORIA, cuando el debate que tuvo lugar me enganchó desde el principio. La pregunta planteada a tal fin fue: ¿Se puede ser gordo y feliz?. Uno de los contertulios era el ex-bailarín de Norma Duval que ha escrito un libro en el que cuenta su experiencia vivida en relación a su operación de estómago. Al parecer él engordó muchísimos kilos, se operó el estómago y ahora está delgado gracias a la operación y a la dieta. Niega tajantemente que se pueda ser gordo y feliz. Afirma que el sobrepeso es una enfermedad y que no se puede ser feliz con esa enfermedad. En la mesa de debate se encontraba una mujer cuya profesión era modelo de tallas grandes y que presumía de ser feliz con su sobrepeso y de estar orgullosa de sí misma. A un público en el que predominaban las tallas grandes, el presentador, Jordi González, pidió que levantaran la mano aquéllas personas a las que si se les diera la opción de tomarse esa misma noche una pastilla que hiciera que al día siguiente se levantaran de la cama pesando diez kilos menos, no dudarían en tomarla. Una aplastante mayoría levantó la mano. Y la modelo de tallas grandes comparó esta hipotética oferta de Jordi, a ofrecerles levantarse al día siguiente con un cochazo (no recuerdo que marca de coche dijo) en la puerta de sus casas. Que nadie rechazaría semejante regalo, añadió. Jordi dijo que ambas ofertas no eran comparables. Yo estoy con Jordi. No son comparables. Visto de otra forma, si a mi me ofrecieran una pastilla que al tomarla hiciera que me despertara al día siguiente con diez kilos DE MÁS, mi respuesta sin duda ninguna sería que no. Y creo que coincidiría con la de cualquiera, ya fueran gordos o flacos. Pienso que sí que se puede ser gordo y feliz, pero también pienso que si se puede elegir, nadie quiere ser gordo. También es posible que la modelo de tallas grandes sea una persona realmente feliz, que se acepta tal y como es, y que no se lamenta en absoluto de sus carnes de más, y que yo por ejemplo, me queje y me esfuerce por perder ese par de kilos que me sobran. Sí, a una persona cualquiera le pueden amargar más tres kilos de más, que a otra treinta. En mi familia política, hay una modelo de tallas grandes, y es una mujer de mediana edad, guapísima y feliz.v Y sí, está gorda, pero viste muy bien, y se arregla, y no es nada desagradable a la vista. En absoluto. Y cómo no, también hay tallas treinta y séis, que viven pendientes de la báscula. ¿Quién es más feliz?, la gorda que se acepta tal y como es, porque sabe que engorda más que el resto de la gente y que por más que lo intente es gorda, ó la flaca, que luce figura consciente de que gusta y es aceptada en sociedad y todas quieren ser como ella y si come más de la cuenta y coge un par de kilos, se amarga y se obsesiona y no está tranquila hasta que los pierde? ... supongo que ése es otro debate. A la pregunta inicial de si se puede ser gordo y feliz, yo respondería que sí, si no te afecta lo que piensen de ti los demás. Sí, porque la felicidad la da el amor, y el amor y la gordura no están reñidos. Sí, porque la infelicidad no es una consecuencia de la gordura. La felicidad es un estado mental no de volumen. Y sí, porque lo son. Hay personas gordas felices, porque sus vidas son plenas y no les falta lo que da la felicidad. Y ya sólo me queda añadir, que no sé quién es nadie para negar que una persona gorda pueda ser feliz.

18 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo creo que no es cuestión de kilos, sino de actitud. Uno tiene que aceptarse tal y cómo es en cada momento de la vida...y así, sí se es feliz.

Uma dijo...

Estoy contigo! se puede ser gordo y feliz, gordo y desgraciado, flaco y feliz, flaco y desgraciado y un sinfin de combinaciones mas...pq la felicidad no depende tanto del aspecto físico como del aspecto mental y la seguridad en si mismo de cada uno...
n fin! que da para 2 horas de conversación con ejemplos prácticos...y luego está la salud...¡nos vamos a cagar las jovenes de ahora con la osteoporosis! pq esas carnecillas de más que no son obesidad, pero si gordura, nos protegían de eso...ahora que todas andamos escualidas (para el uso antiguo) padeceremos de dolores y fracturas...
Y con los obesos idem...¡eso si! a mas corto plazo...

POR ESO YO ESTOY ESTUPENDA...NI ME SOBRA NI ME FALTA NA DE NA!!!
esa es la clave de la falicicidad, ser feliz con lo que se tiene!!
BESOS

Juan Rodríguez Millán dijo...

Que no te moleste en absoluto lo que voy a decir, Claire, porque en absoluto lo digo por ti, pero este debate televisivo lo que me indica es lo enferma que puede estar la sociedad. Enferma de imagen, de una imagen implantada y definida, obligatoria y única. Si no la tienes, parece que no eres nadie, que no puedes ser feliz, que no estás habilitado para tener ciertas cosas en la vida. Y me duele en el alma que la imagen sea lo único que demasiada gente quiere ver en las personas.

A mí lo único que me hace feliz o infeliz en ese caso es la salud. Y se puede perder la salud por tener mucho peso, sí, pero también por tener poco. Pero nadie plantearía en televisión un debate titulado "¿se puede ser flaca y feliz?".

La pregunta al público de Jordi González me parece muy demagógica, como cualquiera que plantee situaciones imposibles. A mí no me parece tan distinta la del coche, pero me vale cualquier otra que plantee como objetivo algo que en un momnento dado es inalcanzable.

Claro que se puede ser gordo y feliz. Sólo hace falta que la sociedad se dé cuenta de que la respuesta a la pregunta que planteas es un rotundo sí. Y, como apuntas, que dejen de aparecer en televisión tipos que nos digan cuándo podemos y cuándo no podemos ser felices.

LA VANE dijo...

Yo no estoy de acuedo. Si que es comparable. Se puede ser gorda y feliz pero si puedes estar mejor lo aceptas. Vamos a hacer otra comparacacion: "Se puede ser economicamente normal (ojo, no pobre, que eso ya es distinto)y ser completamente feliz. Es mi caso. Pero... ¿rechazaria 180.000 euros que me tocaran mañana en la loteria? Noooooooooooo, simplemente seria aun mas feliz.

Atlántida dijo...

Evidentemente no es incompatible, aunque es cierto que en patologias como la obesidad mórbida muchas veces está asociada la depresión y se establece un circulo vicioso entre la ansiedad, el comer y el sentirse peor. Pero la felicidad no tiene que ver con el aspecto físico sólamente, si no con veinte mil pequeñas cositas que hacen que dígamos que lo somos, y entre ellas, la más importante, como tú has dicho, seguramente es el amor.

Scarlett Butler dijo...

pues no entiendo por qué no van a ser felices no?? depende de cada persona!! un besito

Maitasun dijo...

Es la primera vez que pasó por tu blog y llego aquí desde el blog de Ana... y yo te digo que si, que se puede ser gordo y feliz, muy feliz.
Yo hace años que tenía obesidad mórbida, y por salud, NO por complejos, terminé operándome...
¿La diferencia entre antes y ahora? Que peso 60 kilos menos.... ha cambiado mi físico, no mi forma de ser. Y por estar más delgada no me siento mejor persona o más feliz que antes... sigo siendo exáctamente la misma.

Besotes

BK dijo...

Aparte de algunas enfermedades a la que se es más propenso por estar gordo que delgado y que influye en el nivel de vida, me imagino que sí que se puede ser gordo y feliz.

Yo estoy delgada, pero estoy super acomplejada con mi barriguita, jajaja. Es una tontería y me dan una envidia tremenda la gente sin complejos que se ve bien con su cuerpo.

X dijo...

Estoy de acuerdo con quienes han dicho que los dos casos (perder diez kilos o tener un cochazo) sí son comparables. A mí también me lo parecen. Muchos preferiríamos estar más delgados, tener más dinero, tener un coche mejor... no vas a decir que no a un regalo caído del cielo de la noche a la mañana. ¿Es preferible estar delgado? Sí, posiblemente sí. Pero de ahí a que no se pueda ser feliz siendo gordo...

Realmente casi todo lo que estaba pensando decir lo has dicho tú al final del post. La felicidad depende de muchas cosas, no solo de tu estado físico. Se puede ser gordo y feliz, pobre y feliz, y no estar enamorado y ser feliz. Se puede. ¿Que cuesta más? Sí, claro. Son condiciones que ayudan, pero no necesarias ni suficientes.

Sandra dijo...

Pues nena, no no se puede, o eso creo yo, una cosa es q te encuentres bien contigo misma, o que quieras aparentar felicidad. Pero creo q en el interior esa persona sabe q no, q feliz feliz no es. Por muchos motivos, porque desgraciadamente vivimos en una sociedad en la que el aspecto exterior se impone. A ver, no quiero decir que una persona entradita en carnes no tenga un buen aspecto exterior, no, para nada, hay chicas rellenitas o gorditas que son monisimas. Pero no, no se acepta, no esta bien vsito.

Esto es asi, es la realidad, se puede negar o no, pero es lo que hay.

No obstante, nadie esta en posesión de la verdad absoluta, asi que quien afirme que se puede, y que lo es, lo veo estupendo ;)

Tambien decir que si una persona obesa no es feliz, posiblemente el 100% de su infelicidad no tenga nada q ver sus kilos, pero es parte importante. Como ha dicho Dany, es cuestión de actitud. Pero q influye, influye!.


Besos guapa.

Lamamma dijo...

Sandra, no te molestes pero basar la felicidad personal en los kilos que se pesen me parece una concepción bastante pobre. Claro que se puede estar gordo y ser feliz, y estar flaco y ser feliz, y tener un tipazo y ser desgraciado... no tiene que ver el tocino con la velocidad.

Miguel Angel dijo...

Una cosa es una persona digamos gordita...y otra muy distinta, es tener un sobrepeso desmesurado y lo que es peor, obesidad mórbida.
Estas personas yo no creo que sean felices ( puede que alguna si, desde luego )...por muchos motivos, principalmente por salud, autoestima, y la sociedad en la que vivimos, que no acepta ciertos cuerpos.
Yo tenia una compañera de trabajo, que tenia obesidad mórbida, a causa del sobrepeso, tenia una rodilla muy dañada y tambien la cadera, caminaba con una mulata, me confesó que sentia un gran complejo y tristeza...hasta que un dia se operó, haciéndose una reducción de estómago.Hoy es el dia en que ha perdido muchos kilos ( no se a dia de hoy cuantos ),,puede ponerse ropa que antes era impensable, sonrie todo el dias , se siente guapa y querida y tiene la autoestima por las nubes ( hasta el punto que también deberian operarle de ello ).
En fin, yo creo que la gordura generalmente no es buena cosa, pero cada persona es un mundo, desde luego.
Un abrazo Claire.

Rosa Chover dijo...

efectivamente, yo también conozco gente que está gorda y es feliz, también conozco otra que ha luchado por adelgazar incluso con operaciones de estómago y no lo ha conseguido, y en cambio ahora es feliz porque está enamorada aunque no sea una sílfide... creo que el tema está en la mente de cada uno, si queremos amargarnos siempre encontramos un motivo, y efectivamente las que estamos acostumbradas a ser delgadas más o menos el día que pillamos unos kilos de más por las circunstancias que sean nos amargamos un montón... está claro que el patrón actual de mujer de moda es delgada y estilizada, pero ésa debería ser una tendencia de salud y no un icono inalcanzable y que amargara a toda la que no tenga esa constitución, que al final parecemos todas robots sacadas de un mismo molde...

Yandros dijo...

Pues yo opino que el debate está mal hecho desde el principio.
¿Que es la felicidad? Porque creo que tratamos un tema demasiado abstracto. ¿Como se mide la felicidad? ¿Como sabemos, Claire, si tu eres más feliz que yo? Si a lo mejor hasta el concepto de felicidad es distinto para las personas.
El ser humano nunca está satisfecho. Para alguien que no tiene nada, dormir bajo un techo y tomar algo de comer es la felicidad absoluta. Para alguien acomodado, con trabajo, familia...quizás la felicidad sea ver ganar a su equipo de futbol. Medimos la felicidad en función del escalón en el que nos encontramos. La felicidad es algo relativo, einsteiniano.
Por otro lado, como dice Rebe, no creo que la felicidad, caso de ser parametrizable, consista en un único factor. Influyen muchos más. Y a veces la gordura puede traer problemas físicos. Lo malo es que en esta sociedad vemos más problemas a la gordura que a la excesiva delgadez. Ahora si yo soy el presentador pondría una foto de una persona con anorexia y leería todos los problemas físicos y psicológicos que arrastra esta enfermedad. Y preguntaría.
¿Ustedes querrían tomar la pastilla para estar anoréxicamente delgados?

YOLI dijo...

Yo pienso que sí se puede ser gorda y feliz. Probablemente sería más feliz estando más delgada, pero lo importante es que tu te valores y te cuides, que te quieras y que te veas bien. Hay perdonas monísimas de la muerte y sumamente infelices por todo y personas gorditas que solo se entristecen cuando la gente les ofende (insulta), pero ellas se encuentran bien salvo en esos momentos

Sandra dijo...

Lamamma no me molesto mujer, para nada ;) Como he dicho, una persona infeliz no debe esa infelicidad a los kilos de mas ( si hablamos de una persona obesa quiero decir ), solo digo que influye algo.

Y por supuesto q hay personas delgadas q tampoco son felices, por supuesto que no la felicidad no se mide en kilos, solo digo q es un factor importante.

Saludos.

Simone Marie dijo...

Lo importante es la actitud y sobretodo la salud. No es nada bueno, según las características de una persona, estar demasiado delgado o demasiado gordo, no hay cosamás importante que estar sana.

Quitando ese tema...es una verdadera barbaridas obsesionarse con la delgadez..hoy en día es empezar el mes de febrero o marzo y ya te están agobiando con la operación bikini, no es que vaya encarada a los que tengan muchos peso, es que no te permiten tener un gramo de más...asi que sí, se puede ser gordo y feliz, lo mismo que gordo infeliz o delgado feliz o infeliz...se puede ser todo según como te tomes la vida.

Besos;)

Laia... dijo...

Hace tiempo escribí un post acerca de este tema...

No hace falta ser modelo de tallas grandes para ser feliz (pese) a estar gordo. Como apuntan algunos por aquí, la felicidad no te la dan unos quilos de más o unos quilos de menos. Es básico aceptarse, y quererse, y verse bien cuando uno se mira en el espejo. Y eso suele darse más en personas que hemos asumido que este es nuestro cuerpo que en gente que se pasa la vida obsesionada por conseguir un cuerpo que no es el suyo.

He ganado peso respecto a cuando escribí ese post. Y es cierto que hay días que pienso que debería perder algunos quilos, me vería mejor en el espejo. Pero no sería más feliz. Esta sociedad tiene un problema grave, muy muy grave con este tema.